La última apuesta atractiva de Apple TV+ es Idris Elba en «Hijack» (secuestro en el aire). Elba interpreta a Sam Nelson, conocido en el mundo de las finanzas por sus habilidades para lidiar con negocios difíciles quien ahora se ve atrapado en un vuelo secuestrado y obligado a convertirse en héroe muy a su pesar. Así es que Idris Elba tendrá que arreglárselas en un viaje de siete horas para deshacer cualquier peregrina idea que a los secuestradores se les haya ocurrido. Demás está decir que el tema no es nuevo, e incluso cada producción que incursiona en él se arriesga a ser olímpicamente ignorada por poco original si la historia está mal contada. Sin embargo, esta, se percibe bien ejecutada, llena de suspenso, y termina convenciendo.Todo lo anterior gracias a Idris Elba , quien, querámoslo o no, es el pilar de la historia. Lo complicado de Hijack, es que el involucrarse en el tema de los aviones secuestrados es una apuesta arriesgada como dijimos, ya que para hacerlo bien, debe desafiar y satisfascer varias premisas firmemente establecidas para este sub-género como son por ejemplo la construcción coral de los personajes de los pasajeros, pues se tienen que crear para ellos — aunque sólo sea brevemente — caracteres que interesen, convenzan y aporten a la trama.
Una de las interrogantes que se plantean al comienzo del tercer episodio de Hijack, es si las armas que los secuestradores están utilizando son reales o falsas. Uno de los pasajeros de primera clase cercanos, quien está teniendo una discusión en voz baja con su esposa llama la atención de Sam y Hugo al especular con la posibilidad de que las armas sean falsas. Sam está en desacuerdo con su compañero de viaje Hugo y le pide que abandone la idea para la tranquilidad de los planes de auxilio que supuestamente se estarían llevando a cabo en tierra gracias a la estrategia puesta en marcha por el capitán del avión para hacer saltar las alarmas y al comunicar que el avión efectivamente estaba sufriendo una emergencia.
Finalmente, se descubre que las balas que utilizan los secuestradores son de fogueo. Esto se hace evidente cuando se dan cuenta de que nadie resultó herido cuando se disparó la pistola en el segundo episodio. La conclusión es que las armas son reales, pero cargadas con balas de fogueo, por otrao lado como Stuart demuestra en los momentos finales del episodio 3, los captores también tienen acceso a munición real y letal. Otro nuevo misterio evidenciado en este episodio, es que Stuart y sus secuaces están trabajando para otro líder desconocido que participa en la operación. Al parecer el secuestro se está llevando a cabo por instrucciones de una organización de la que los secuestradores son meros peones bajo coacción. Otro hecho notable y que hace a los secuestradores poco creíbles, es que estos, a pesar de ser intimidantes, no son todo lo violentos que cabría esperarse. Sorprendentemente, el ataque más brutal en lo que va de la serie, fue la agresión del capitán Robin a su copiloto con una botella de agua metálica, que es el momento más disonante de Hijack hasta ahora.Sin embargo las escenas finales del episodio son las más violentas de la serie, cuando Sam y uno de los secuestradores llevan la intensidad a un nuevo nivel. En ese momento, los secuestradores recurren a la violencia para defenderse, ya que los pasajeros se rebelan.
Mientras tanto en tierra los esfuerzos se centran en averiguar los antecedentes de los pasajeros en busca de alguna pista que les ayude a dilucidar la naturaleza del hasta ahora extraño secuestro. El suspenso final del episodio plantea la pregunta de quien disparó el arma que sonó como un disparo con balas de verdad.
Para los que siguén la distópica Silo, recuerden que ya tuvo su «finale» de temporada, y nos ha dejado en suspenso por un buen rato. Aquí les dejo el trailer de Hijack para saciar un poco la curiosidad.
